EL MEJOR BLOG DEL UNIVERSO (ESTE) CUMPLE UN AÑO.

¿Les cuento? Hace un rato casi me puse a llorar de emoción. El ocho de marzo me sonó a fecha importante así que hice un repaso de todas las fechas importantes en la cabeza: cumpleaños de mi vieja, no. De mi hermana, no. De mi hermano el gil, tampoco. Mi papá, menos. Aniversario con Lu, tampoco. Eso es los días once. Falta poco pero no. ¿Entonces? Pues resulta que el ocho de marzo hace un año fue el día en que me metí a Internet a hacerme lo que juré nunca me iba a hacer: un blog.

Claro, en mi curso todos los giles tenían, pero subían puras leseras. Había uno (El Pajarraco Jerez) que subía puras fotos donde salía él abrazando a sus amigotes, preferentemente minocas feas, todos con los ojos de vampiro por el flash y comentarios escritos así: “*~..MaRtInA..~* Te aMo MáS k nO Sé k” y símbolos y cabezas de pescado, etc. porque el pajarraco no sabe escribir.

Claro que yo como soy cinéfilo quería hacer algo con películas y esa semana había visto caleta así que hice muchas críticas serias e intelectuales a las películas del cine mundial.

Yo juraba que el blog no lo iba a leer nadie, de hecho iba al cine solo y escribía en las noches, con una velita con olor perfumando mi pieza (que siempre tiene un olor raro), comiendo ramitas de queso con Bilz e imaginándome que había alguien en alguna parte que podía leer y decir “¡Yo pensé lo mismo viendo esa película!” y después “Hermes es maestro y se va a ganar un Oscar” y después “Cuando grande quiero ser Hermes” y después “Me quiero casar con Hermes” y todas esas cosas que uno sueña que dicen los demás sobre uno.

Bueno, resulta que por ahí el blog salió en el diario, a no sé quién le gustó y lo recomendó y de a poco empezó a llegar más gente y yo me lo empecé a tomar más en serio. Escribía más largo y empecé a investigar incluso (en Google) antes de escribir para no hablar puras leseras, y ahí me llamaron de la revista famosa y aunque todos me odiaron, yo estaba feliz de que Bill Gates hubiera inventado los blogs virtuales digitales de computación, porque ya no andaba más achacado por la vida.

La dura. Antes yo en el recreo me quedaba en la sala pensando en encontrar una polola desde que la otra guatona me pateó, y molestando a los nerds que se quedaban jugando ajedrez, pero en el fondo los molestaba por pura envidia porque ellos al menos tenían un amigo nerd con quien jugar ajedrez y yo tenía puras películas que ver y cosas falsas en las que pensar.

(Nota: Si el Lagos o el Pardo están leyendo esto, en realidad es mentira, no envidio a los nerds, jajaja, nerds, más giles, apuesto que todavía andan buscando el alfil que perdieron cuando les tiré una coronta de manzana arriba del tablero y que reemplazaron con una goma con un alfil dibujado, jajaja, eso les pasa por nerds) (Nerds)

La cosa es que todo eso cambió y ahora hasta me piden autógrafos en la calle. No, eso es mentira también, nadie me pide autógrafos. De hecho nadie me reconoce en la calle y ni siquiera me hacen rebaja en el Hoyts, pero filo. Ando contento. Además un día una chiquitita linda se metió a este blog y dijo “Me quiero casar con Hermes”. Empezamos a coquetearnos y terminamos pololeando. Se llama Lu y mi pololeo con ella es un mensaje de esperanza para todos los que se sienten solos: Escriban el mejor blog del universo y encontrarán a su alma gemela. Claro que van a tener que esperar a que yo me muera o me retire, porque hasta entonces, este blog será el rey.

Así que eso.

Gracias a todos por la buena onda, los quiero caleta. A los hombres en una manera completamente antihomogay y a las mujeres como amigas. Porque Lu es celosa, claro. De hecho ahora anda enojada porque no la saludé para el “Día de la mujer”… Yo le dije que la iba a saludar cuando fuera el “Día de las Musas Maravillosas del Universo” pero no me compró y cree que es porque soy insensible. Nada que ver, en todo caso.

Bueno eso. Un año más, qué más dá. Cuántos se han ido ya. Yo sigo con ganas de ir al cine y de escribir, así que todavía no se acaba esta película.

© Hermes.